Junio podría ser el mes decisivo para la posible venta de la Roma por parte de los Friedkins. La noticia circula desde hace algunos días junto con el nombre del posible comprador, Raffaello Follieri. Hoy y según informa Milano Finanza, son necesarias ciertas condiciones para que esta operación se lleve a cabo.
Todo depende de la voluntad efectiva de la familia estadounidense de vender la empresa. Decisión que gira en torno a dos cuestiones: la construcción del estadio y la clasificación para la Champions League. En caso de que se apruebe el proyecto de Pietralata, de hecho, los Friedkins difícilmente se decidirán a dejar las riendas del club. Además, la clasificación a la prestigiosa competición europea traería importantes ingresos que empujarían a los estadounidenses a mantenerse al frente.
En consecuencia, no es difícil suponer que las negociaciones solo comenzarán después de que termine el campeonato. Follieri ya se ha mostrado su disposición para la compra, incluso en el caso de que el Inter para la construcción del estadio no se lleve a cabo.
Las negociaciones van adelante (se habla de dos reuniones, una en marzo y otra en diciembre), la oferta en bandeja ronda los 750 millones, mientras que la petición es de mil millones.