Será crucial la semana que viene, cuando Dzeko y Mourinho tengan contacto directo para dialogar y aclarar las cartas sobre las mesa. En ese momento se decidirá el futuro del delantero bosnio, que básicamente sigue bailando entre una estancia de un año en la Roma o irse a jugar a otro lado, quizás aceptando la oferta de Los Ángeles Galaxy. En su corazón, Dzeko ya ha tomado la decisión y es quedarse en Roma.
Según cuenta La Gazzetta dello Sport, Edin está seguro de que con Mourinho encontrará ganas y motivación, el pulimento de los mejores días. El técnico también parece estar convencido de la aportación que todavía puede dar Dzeko a la Roma, también porque sustituirle supondría invertir al menos treinta millones en el mercado, dinero que le gustaría destinar a otros roles del plantel que cree necesitan ser reforzado con más urgencia.