Nueva etapa para Nicolò Zaniolo, que regresa a la Fiorentina después de muchos años de salir de sus inferiores. El ex delantero de la Roma estuvo ayer en la grada en el partido de recuperación ante el Inter donde no pudo estar disponible al no ser titular en el conjunto viola en diciembre. Hoy la clase del 99 se presentó en rueda de prensa:
¿En qué etapa de tu carrera profesional te encuentras? «Es una etapa muy importante para mí. Volver aquí fue lo correcto, después de haber cambiado tantos equipos. Todos me recibieron muy bien. Encontré mi casa de nuevo, me fui con 15 o 16 años y vuelvo diez años después. Estoy feliz y doy las gracias a todos».
Sobre los rumores relacionados con su persona y la elección de Florencia. «¿Yo, un tipo impulsivo? Son cosas que dicen ustedes, nunca he tenido problemas con nadie, ni en el extranjero ni en el Atalanta. Sé lo que valgo. Sólo me sentí un poco mal conmigo mismo por como deje la Roma, nada más. Los años han pasado, pero la gente no. En Florencia sentí inmediatamente el aire de casa».
En su camino está Kean. «Palladino tiene razón, no ha tenido que convencerme, porque creo que es el paso correcto para mí venir aquí. Estoy muy feliz por Moise, somos prácticamente hermanos. Lo conozco desde hace mucho tiempo. Estaba seguro de que lo haría bien aquí. Voy a dar lo mejor de mí para que también lo haga bien».
Sobre su celebración. «El celebrar es una de las cosas más bonitas del fútbol, respetando siempre al rival y a la afición. Me gusta hacerlo así».
Sobre la elección en junio. «En junio tuve la oportunidad de elegir entre Bérgamo y Fiorentina, no lo niego. No siempre se toman las mejores decisiones. Luego, en enero, decidí dar este paso porque la Viola me quería de nuevo con fuerza».
Sobre el deseo de venganza. «No es una cuestión de revancha. El partido contra la Atalanta se acerca y yo soy jugador de la Fiorentina. Sólo pienso en la Viola. Nunca he tenido problemas con Gasperini, de hecho le doy las gracias. Me ha hecho mejorar mucho».
Sobre Bove. «Tengo una buena relación con Edo, lamento lo que le pasó. Siempre estoy a su lado para darle una mano y apoyarlo. Cuando llegó del equipo Primavera de la Roma conocí a un chico extraordinario, que nunca dice una palabra fuera de lugar y trabaja duro. Fuera del campo también es muy simpático. Lo quiero mucho».
Sobre las virtudes y defectos. «En cuanto a mis puntos fuertes, mi ritmo en el uno contra uno, mi potencia y mi capacidad para disparar desde fuera. Mis puntos débiles son mi pie débil, mi cabezazo y la falta de determinación competitiva que tengo en algunas situaciones».
¿Remordimientos? «No me arrepiento de nada, porque cuando tomé decisiones fue porque pensé que eran las correctas en ese momento. Soy joven todavía, tengo 25 años, y todavía tengo toda una carrera futbolística por delante».
