Nicolò Zaniolo, ex atacante que dejó la Roma en enero para fichar por el Galatasaray, concedió una entrevista exclusiva a La Gazzetta dello Sport. Aquí un extracto de sus declaraciones:
¿La no renovación pesó en su despedida?
“Podría hablar horas sobre promesas incumplidas. Me dijeron que era punta de lanza, pero siempre me han considerado una ganancia de capital. Durante dos años me dijeron que el nuevo contrato estaba listo. En enero del año pasado hubiera firmado por un poco más de lo que ganaba, porque estaba bien en Roma y sabía que había problemas con el Fair Play Financiero. Después de mucho hablar me aburrí. Si yo tengo que reflexionar sobre mi salida, creo que los demás también deben hacerlo”.
Sin embargo, parecía que la Roma no tenía entre manos ninguna oferta que considerara adecuada por usted ?
“En realidad no, solo Bournemouth y Galatasaray, pero por no haber aceptado a los ingleses me echaron y la afición se desquitó conmigo. Algunos me persiguieron en auto, otros llegaron a mi casa. Mi familia y yo nos asustamos porque nos sentíamos solos. Eran personas enfadadas con las que no podías hablar. En esos días también apagué el celular porque también llegaban mensajes amenasadores”.
¿Cómo dejó a sus compañeros?
“Me quede decepcionado de casi todos mis compañeros. No diré nombres, pero dijeron que éramos como hermanos y luego ni se despidieron de mi».
Si decimos Feyenoord, ¿en qué piensas?
«Fácil. En la Roma que le pilló en la Copa. Y me recuerda que probablemente fue la mejor noche de mi vida futbolística hasta el momento, junto con la del Porto, en la que marqué dos goles en Champions, y en mi debut con la selección. Solo marcar el gol decisivo en la final contra los neerlandeses hace que la Conference la sienta muy mía. Si luego pienso en la fiesta en el Circo Máximo y los fans, todavía me dan escalofríos, pero no quiero quedarme con eso».
Por otro lado, será difícil tener amigos romanistas: lo han tildado de traidor.
«Es algo que lamento mucho. La Roma me dio todo, gracias a la Roma gané y debuté con la selección, allí nació mi hijo. Ser definido de esa manera es un duro golpe».
Admítelo: probablemente también te equivocaste en ciertas circunstancias.
“La verdad saldrá a la luz. Te digo que siempre he entrenado, aunque no con los demás”.
No lo ocultemos: algunos excompañeros también podrían encontrarlos en la selección. ¿Problemas por delante?
«No lo creo. Tal vez alguien pueda tener problemas conmigo. Yo no tendre ninguno. Cualquiera que tenga remordimientos de conciencia lo sabe».
¿Qué relación tenía con Mourinho? Se dice que se adapta mejor a los campeones que a los jóvenes.
“Es un gran entrenador y una gran persona. Me hizo jugar casi todo el tiempo. Claro, él está acostumbrado a manejar jugadores estrella y yo no soy uno. Me hubiera gustado tenerlo por cuatro o cinco años, pero igual me dio mucho».
Pero rasgaste la camiseta contra el Genoa: eso peso mucho en la afición.
“Fue solo un gesto de molestia, no de desprecio. Es como si le diera un puñetazo a la hierba. No tenía la intención de ser irrespetuoso».
Nunca ha tenido una relación idílica con la afición de la Lazio.
“Pero esas son cosas del fútbol, pasan. Nunca he tenido ningún problema fuera de la cancha. De hecho, tengo varios amigos de Lazio”.
¿Seguirá el partido de la Roma con el Feyenoord?
«Seguro. Tiene un equipo muy fuerte. Puede ganar la Europa League y acabar entre los cuatro primeros».
¿Cómo se siente en Estambul?
Muy bien. Es una ciudad en la que prospera el fútbol, los fanáticos siempre son amables y respetuosos, incluso cuando te piden videos y selfies. El estadio, entonces, es increíble. Aún no jugue en los partidos más caliente, por lo menos está a la altura del Olimpico. Cuando marqué mi primer gol sentí que estaba volando».
Zaniolo, tienes una cláusula de rescisión de 35 millones. No es ningún misterio que la Juventus y el Milan la siguen, y quizás no solo ellos. ¿Nos equivocamos al pensar que podría volver?
“¿Comenzamos de inmediato con el mercado de fichajes? Mira el futuro, nadie lo sabe. Por supuesto, no puedo garantizar que me quede en Turquía durante cinco años, pero mientras esté aquí haré lo mejor que pueda».
