En casa en Roma, ante la NO venta en el mercado de invierno, el caso Nicolò Zaniolo sigue aguantando. Según informa SkySport, de momento el 22 amarillo y rojo sigue en La Spezia, a donde llegó este el lunes, pero mañana volverá a Trigoria para entrenar.
Lo más probable es que lo haga en un campo separado y en momentos diferentes a los de sus compañeros mientras espera cualquier novedad. Una elección que subraya aún más la ruptura ahora incurable con la sociedad, el equipo y la afición.
Según cuenta Il Messaggero en el horizonte existe la posibilidad de una disputa legal. No se puede descartar que la familia del atacante desate una batalla contra la Roma por la masacre mediática que se ha producido en los últimos días (según los padres, desencadenada por el club).
El mobbing y la presión psicológica son solo algunas de las acusaciones que la familia Zaniolo pretende lanzar contra los gitanos. También se informó al Assocalciatori, que tiene la función de brindar asistencia a los jugadores en dificultades con sus clubes.