La mayoría de la afición de la Roma le espera con paciencia, con la conciencia de que en una plaza donde se esperan jugadores que ciertamente no han resultado campeones (Iturbe, Dumbia, Ibarbo por nombrar algunos) no se puede tener prisa con un joven que ha demostrado un talento cristalino como Zaniolo escribe Gianluica Piacentini en el Corriere dello Sport.
Al día siguiente de la derrota ante el Verona, sin embargo, Nicolò también acabó en el centro de algunas críticas: este es precisamente el momento más complicado, lo sabe y también lo sabe José Mourinho, que sigue dándole una confianza incondicional. Nadie mejor que el Special One para gestionar su talento e incluso su recuperación: porque una cosa es el trabajo que se hace con los médicos para volver a jugar, otra es gestionar el estado de forma en partidos reales que valen tres puntos. Tiempo y tranquilidad, estos son los ingredientes que necesita Zaniolo, que ha cerrado (de nuevo) su página de Instagram hace unos días: quiere pensar solo en el terreno de juego, sin distracciones, para volver al anterior.
De cara al partido contra Udinese de este jueves Mourinho tendrá que valorar si confirmar a Zaniolo en el once titular o gestionarle, no tanto y no solo de cara al derby sino sobre todo para permitirle encontrar por fin la mejor condición atlética y psicológica. Carles Pérez, por tanto, podría tener una nueva oportunidad.
