Pocos creían en su vuelta hasta ayer por la tarde cuando Zaniolo subió al autobús antes de llegar a Fiumicino. Mourinho le llamó una semana antes de lo previsto. El técnico ha pedido disponibilidad al jugador quien tenia muchas ganas de volver al campo. Y no se lo ha pensado dos veces. Este lunes Nicolò en el banquillo ante Empoli con la esperanza de que no haga falta su aportación según cuenta Corriere dello Sport.
El atacante giallorossi nunca dejó de entrenar, incluso cuando tenía el aparato ortopédico. El cual dejó a un lado la semana pasada e hizo dos entrenamientos secretos con el equipo: viernes y sábado. Si hacía falta contar con él, este retrocede.
En cualquier caso, estará sobre el césped el jueves ante Helsinki un segmento del partido y luego apuntará a salir como titular ante el Atalanta.