No todo es tan idílico como parece. Pese al buen ambiente entre ambas aficiones en las horas previas a la final, según informa Mundo Deportivo, se habría producido un grave altercado que ha dejado a un fan de cada equipo hospitalizado.
Se trata de de un aficionado de la Roma, y otro del Sevilla, que tras los reportes policiales, se habría enzarzado en una pelea en la avenida Egressy de la capital húngara. Estos dos individuos no serían los únicos partícipes de esta trifulca, en donde varios testimonios apuntan a una revuelta con más gente.
Además, se ha abierto una investigación por un presunto delito de vandalismo cometido en grupo, la cual se ha saldado con 7 detenidos, todos ellos polacos. Y es que en los días previos a la final, las fuerzas de seguridad de Budapest esperaban enfrentamientos entre los ultras del equipo de Nervión, y sus homólogos del Slask Wroclaw. Esta rivalidad viene de 2013, tras una pelea entre ambas aficiones a raíz de un enfrentamiento en la previa de un partido de la Europa League.