A partir de la semana que viene Tiago Pinto volverá a estar operativo en Trigoria con tres objetivos importantes, escribe Chiara Zucchelli en La Gazzetta dello Sport: establecer las fechas de preparación, construir la Roma que vendrá con Mourinho, aligerar la plantilla.
Las ventas son una prioridad máxima, porque los jugadores que sobran pesan sobre el presupuesto (al menos) 70 millones. Para Florenzi, la opción PSG podría reabrirse, con el rescate en 9 millones, mientras se trabaja para encontrar un equipo a Nzonzi que además de Rennes también gusta al Benfica. También se venderá a Fazio, que gustan al Parma, Verona y la Sampdoria, pero aún tiene un año más de contrato y un salario de más de 2 millones, aunque la Roma estaría dispuesta a dejarle en libertad.
Santon tiene ofertas del exterior, de Turquía sobre todo, pero no querría moverse de Italia también porque le tentó la idea de jugarse, aunque parece más un sueño, una chance con Mourinho quien lo hizo debutar en el Inter. Kluivert y Ünder serán evaluados por el Special One, pero el turco tiene un par de ofertas para volver a su tierra natal y también gusta en Alemania. Pastore es el quebradero de cabeza más importante: a él le gustaría acabar su carrera en Talleres pero no es fácil. Para la primera semana de julio todo debería estar aclarado, la directiva de la Roma también estaría valorando la opción de dejarle ir como agente libre tras cerrarle su contrato, tampoco es una solución fácil, ya que el ex del PSG todavía tiene un contrato de dos años con más de 4 millones de salario.