Paradigme

Soulé se ha ganado a todos en la Roma y es querido por el grupo pero Matías está viviendo mal el malestar de ‘La Joya’

El pequeño ha crecido. Sí, el niño ha crecido. De repente, de pronto, probablemente más rápido de lo esperado escribe Stefano Carina en el diario Il Messagero. Una fase de de entrenamiento de una semana en Inglaterra y un par de amistosos contra Barnsley y Everton le bastaron para ganarse a la Roma. Y los rumores sobre el futuro de Dybala importan hasta cierto punto. Porque un par de entrenamientos bastaron para que Trigoria se enamorara de Soulé. Desde Pellegrini hasta De Rossi, Matías conquistó a todos. Esa sonrisa contagiosa del chico marplatense da la sensación de que está donde realmente quiere estar. La Roma lo quería y él quería a la Roma. Sin vacilar jamás, ni siquiera cuando la negociación parecía haberse estancado. Vino por De Rossi, por sus amigos Paredes y Dybala pero sobre todo porque se sentía querido y halagado. Para jugar en el Olímpico tendrá que esperar hasta la segunda jornada del campeonato pero en Cagliari, en su debut, le tocará. Sí, al menos teniendo en cuenta los amistosos. Desde su llegada, la DDR siempre lo alineó como titular.

Los abrazos durante los entrenamientos, la atención con la que Daniele le dedicaba (habla en español) durante las sesiones es algo que no pasó desapercibido en Inglaterra. Parecía como cuando en una familia un padre tiene debilidad por un hijo pero no puede mostrarlo demasiado porque haría sentir mal a los demás. Después de todo, Soulé encarna el mantra de Daniele: calidad y velocidad. Todo lo que necesitas es que el balón este entre sus pies y sabes que algo puede pasar. Sucedió en el ensayo en St. George’s Park ante el Barnsley con la asistencia con los ojos cerrados a Dybala y el globo con el que anotó el 4-0 desde fuera del área. El segundo, unos días después, en Goodison Park, ante el Everton con el balón en el cuentarrevoluciones para el gol provisional de Pellegrini.

Soulé parece inspirarse en un antiguo anuncio de coches de los años 80 que tenía un slogan que caló en el corazón de los italianos: «A quien le gusta, le gusta». Sí, porque Matías gusta, poco se puede hacer. En un instante se convirtió en la mascota del grupo argentino. El de burlarse durante un viaje en autobús -después de una sesión de paintball para cimentar el grupo- porque se quedó dormido o para estorbar mientras tomaba mate. Soulé se ríe. Al fin y al cabo, alguien que nació con «una pelota bajo el brazo», y que recibía golpes desde los 4 años jugando con los amigos de su hermano Agustín, que eran 5 años mayores que él, eso son caricias. .

Llegado a la Roma, Matías tiene en Dybala un referente. En Burton fue la sombra de Paulo. Lo siguió a todas partes, dentro y fuera del campo. Y está claro que la situación de su compatriota no puede complacerle. Los tres argentinos, junto con Angeliño, son muy cercanos. Y Matías está viviendo mal el malestar de ‘La Joya’. Quien, por su parte, contactado ayer en la ciudad por el agente Novel (en contacto con Ghisolfi), volverá hoy a abrazar a su esposa Oriana. El lunes por la noche fue a cenar con Paredes (Soulé no estaba, pues se había regalado un día de playa con su novia), otro que no apreciaba haber acabado en el caldero de los prescindibles con destino a Arabia. Ni siquiera Leo tiene la más mínima intención de mudarse. Hoy el equipo vuelve a los entrenamientos. Necesitamos saber si De Rossi hablará con Paulo. Hasta ahora, desde el sábado, después del amistoso contra el Everton por así decirlo, no ha sucedido.

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