Empecemos por Smalling, el gran ausente este inicio de temporada. El inglés esta de baja desde el partido contra el Milan del pasado 1 de septiembre y no se le ve sobre el campo desde hace mes y medio. Durante sus ruedas de prensa, Mourinho nunca ocultó su preocupación por los problemas del inglés: la inflamación del tendón le provocó dolores en los primeros partidos disputados en el campeonato, hasta el punto de tener que parar durante un largo periodo, obligando a la defensa a entrar en emergencia.
El dolor ha desaparecido, pero teniendo en cuenta los problemas del pasado (y el presente) el central quiere hacer una prueba sobre el terreno de juego antes de dar y recibir el visto bueno definitivo para volver cuenta Corriere dello Sport. Será difícil verlo en el campo con la camiseta titular, pero para la Roma tenerlo al menos en el banquillo sería sin duda una buena noticia también para la moral.
Naturalmente, el enfrentamiento ante Monza también es objetivo de Renato Sanches y Diego Llorente. Ambos ha superado sus respectivas lesiones y ahora ambos quieren acelerar para estar a disposición del técnico el domingo por la tarde. El portugués para el banquillo, el español para una camiseta titular. Con Renato Sanches, todo Trigoria profesa cautela dado su historial de lesiones y las ya dos largas paradas al inicio de temporada.
Por tanto, máxima atención a Trigoria en la gestión de los jugadores que regresan de lesiones. Las ausencias han comprometido el inicio de temporada, ahora Mourinho espera evitar más paradas para evitar una emergencia en los departamentos, para finalmente poder dar mayor equilibrio al equipo, pero también tener más alternativas en el banquillo para explotar durante el fósforo.