A menudo se lo ve caminando por las calles de Palazzo Chigi y Montecitorio, pero no para tratar de enganchar a algunos políticos o entretener a las relaciones públicas. No, Ryan Friedkin vive allí, en vía dei Prefetti, escribe Andrea Pugliese en La Gazzetta dello Sport.
Esa es su sede, mientras que la otra casa en Corso Vittorio Emanuele (en renovación) será para sus hombres de confianza (Watts y Williamson). Todo en el centro de Roma, en ambos casos, porque el nuevo vicepresidente de Giallorossi decidió sumergirse de verdad en la aventura de su Roma.
Entró en Trigoria de puntillas y ahora poco a poco se está apoderando de todo. Se detiene a mirar el primer equipo, los juveniles, le gusta mucho el Primavera (que por cierto lo está haciendo muy bien). Y luego se centra en el conjunto femenino, en casa en EUR, otra zona de la capital que ahora se ha convertido en un punto de referencia para el vástago de la familia (aunque solo sea porque allí también está la sede del club).
Mientras tanto estudia, y también mucho. No solo las cartas y los hombres, sino también el idioma. De hecho, hay un profesor de italiano permanente a su disposición y el ponente nos asegura que el progreso ya es evidente. Sin embargo, para no equivocarse, quería un conductor que también hablara inglés perfectamente.
