En noviembre, antes del parón mundial, nadie habría apostado un euro porque Rick Karsdorp cuando se reanudara el campeonato volviera al campo. Los imprevistos del mercado y las dificultades para encontrar un comprador serio han cambiado las cartas sobre la mesa cuenta ForzaRoma.info.
Hubiera sido aún más difícil imaginar al neerlandés nuevamente en el grupo. Y en cambio Josè Mourinho ha vuelto a demostrar que hasta el perdón puede ser una posibilidad. Que nunca se niega una segunda oportunidad. Tras las (inéditas) disculpas del portugués por las duras palabras dirigidas al Karsdorp tras el Sassuolo-Roma, el feeling entre ambos ha resurgido.
El lateral causo baja en el momento más importante de la temporada por un problema de meniscos, pero aún así quiso participar en la final de Budapest, destacándose también por el gesto de la mal digerida medalla entregada por Ceferin. ¿Y el futuro? Las exigencias de la Roma no han cambiado: 12 millones por su salida.
También porque el contrato del futbolista expira en 2025. No llega ninguna oferta, pero Mourinho de cierta manera cuenta con el jugador. Karsdorp, de hecho, puede quedarse y formar parte de una lista de laterales/carrileros que resultó ser particularmente insulsa durante la temporada pasada.