Claudio Ranieri ha comparecido en la rueda de prensa previa al AS Roma-Porto de este jueves, que puede marcar un antes y un después en los objetivos de este equipo. El técnico italiano, acompañado de Gianluca Mancini, se ha mostrado confiado y arropado por un publico, que volverá a vivir una de sus grandes noches.
Esto es lo que ha dicho:
¿Ha recuperado a todos los jugadores?
«Hasta ahora sí. Como siempre, esta noche decidiré el once.
Si hubieras llegado antes, ¿dónde estaría la Roma? ¿La queja del club contra la UEFA?
«No me interesan estas cosas. El árbitro es un joven talento francés, dirigió la final de la Eurocopa y también me arbitró en la Ligue 1. Es un árbitro muy bueno. En más de 200 partidos nunca he dicho nada sobre los árbitros, hacen un trabajo muy difícil. En lo que a nosotros respecta, cada uno tiene lo que se merece: los purasangre se ven al final. Todavía hay mucho que mejorar. Lo que cuenta es lo que están haciendo los chicos: han recuperado la autoestima, se divierten y juegan el uno para el otro».
¿Cómo está Dovbyk?
«Está mejorando, es nuestro goleador principal. Algunas veces es un punto de referencia, otras veces no podemos darle las pelotas correctas. Estoy satisfecho, solo con el trabajo se pueden mejorar algunas situaciones».
¿Cómo está Hummels? ¿El amigo que le recordó a Budapest fue Mourinho?
«¡Qué fantasía tienes! De todos modos no. Me lo dijeron en el vestuario, no sé por quién, pero no es José. Hummels se está recuperando bien, tiene un paso más explosivo y está recuperado».
¿Un balance de estos primeros meses? ¿En que no hay que equivocarse mañana?
«El equipo está bien, los chicos me han seguido desde el primer día y me han aceptado. En la ida hicimos una gran actuación, incluso con diez hombres».
¿La baja de Saelemaekers? ¿Cómo está Rensch? ¿Puede Soulé jugar en ese papel?
«Esta noche revisaré toda la semana y elegiré quién puede hacerlo bien en la banda. Todos son una opción. Soulé me impresionó contra el Nápoles en esa posición, él también podría jugar allí».
En las faltas directas, en los saques de esquina, la Roma sufre fácilmente. ¿Cree que es algo casual o está trabajando para resolver algún problema que tal vez a los ojos de los menos expertos sea invisible?
«No, siempre trabajamos y hablamos constantemente de ello. Sin embargo, creo que a veces también hay cierta casualidad. Seguramente hay errores, pero me parece que, quitado el gol, contra el Oporto lo hicimos muy bien. Sabemos que es un equipo que siempre juega en vertical, como el Parma. También en el Parma hemos quitado mucho de esta verticalidad, así que creo que a veces hay períodos en los que se reciben goles en determinadas situaciones. Mañana con el Oporto tenemos que tener mucho cuidado porque, repito, es un equipo muy técnico y rápido, que juega de forma directa apuntando inmediatamente a la portería contraria. Siempre tendremos que estar muy, muy atentos».
¿Celik?
«Es un jugador defensivo. Cuando tiene la pelota quiero que se proponga; a veces falla algunos pases de más, pero tiene muchas ganas de participar. Cada uno de nosotros tiene defectos y él está trabajando mucho».
¿Cómo se entrena esta dificultad para ver la portería con un equipo que de todos modos tiene una nivel técnico muy alta? ¿Hay algo en particular en lo que más se preocupa?
«El Parma fue un partido un poco especial, porque ellos, jugando en diez, cerraron todos los espacios. Sucedió un poco lo que pasó ayer en Atalanta: giraban, giraban y no podían encontrar la puerta correcta. Esto puede pasar. Pero me parece que el equipo se está comportando bien, tanto por los goles marcados como por los recibidos. No creo en los algoritmos, pero las estadísticas dicen que si tienes ciertos jugadores acostumbrados a marcar un cierto número de goles, puede haber un año en el que hagan menos y otro en el que hagan más. A veces depende de quién marque goles y de cuántos jugadores puedas marcar».
