«No sabemos a qué Roma nos enfrentaremos, para nosotros es un signo de interrogación». La mejor fotografía de la situación en los Giallorossi la da Antonio Conte, escribe Gianluca Piacentini en Il Corriere della Sera. El equipo que saltará al campo del Maradona lleno de interrogantes. No tanto porque Ranieri haya estado practicando tácticas previas en los últimos días, sino porque sin los internacionales (el viernes primer entrenamiento de todo el grupo) ha tenido muy poco tiempo para preparar el partido. Por ello, el técnico de Testaccio probó cuatro formaciones diferentes: 4-4-2, 4-2-3-1, 4-3-3 y 4-5-1, siendo los dos últimos de diferente declinación entre sí. del otro.
La noticia de ayer es que Paulo Dybala ha viajado con el equipo y recién en el último momento Ranieri decidirá si lo utiliza o no. Su presencia desde el primer minuto también afectará a la formación: con ‘La Joya’ como titular, de hecho, el técnico podría optar por el 4-4-2 con el argentino junto a Dovbyk y un centro del campo más musculoso, con Pellegrini en la izquierda y El Shaarawy por derecha y la dupla Koné-Cristante en el centro. Sin Paulo, la Roma se centrará más en las bandas, fortaleciendo el centro del campo: en este caso jugarían tres jugadores en el medio, Cristante, Pellegrini y Koné, con Soulé en la derecha y El Shaarawy en la izquierda y Dovbyk como único delantero.
En defensa, la recuperación de Hummels es una buena noticia, pero no debería cambiar la idea de Ranieri de volver a una defensa de cuatro, con Mancini y N’Dicka en el centro, Celik y Angeliño en el exterior.