El partido entre Venezia y Roma, previsto para el domingo a las 12.30 en el estadio Penzo, no contará con la afición giallorossi procedente de la región de Lazio. De hecho, el gobierno local ha aceptado la propuesta del Observatorio de acontecimientos deportivos, ordenando la prohibición de la venta de entradas a los residentes de la región.
La restricción se extiende también a todos los residentes en las provincias de Udine y Pordenone, tras los enfrentamientos entre aficionados del Udinese y del Venezia. Los aficionados de la Roma que no residan en la región del Lazio podrán seguir accediendo al estadio, mientras que aquellos que ya habían reservado trenes y hoteles para seguir al equipo desde la capital ahora no podrán salir. Por el momento, el club giallorossi aún no se ha pronunciado oficialmente sobre la decisión.