«En septiembre tendremos una Roma aún más fuerte«. Esta sería la promesa de Tiago Pinto, que ya busca construir el equipo del futuro según reporta hoy el diario Il Tempo. Con muchas ideas pero también muchas incógnitas y dificultades a superar. Todavía es pronto, muy pronto, para hipotetizar escenarios concretos, pero algo en el interior del club –y con todo el apoyo de Mourinho– ya está decidido: la próxima temporada el equipo no se verá retocado como en las dos últimas sesiones del mercado de fichajes. si revolucionado.
Con importantes llegadas y salidas. Al menos cuatro o cinco titulares tienen que cambiar hoy si de verdad quieren aspirar a una recuperación que hoy parece lejana. Prácticamente todo el mundo está en discusión en la Roma de hoy, con muy pocas excepciones. Se puede apostar por la permanencia de Abraham, Pellegrini, Rui Patricio (ayer celebró su cumpleaños con el equipo casi completo) y Mancini (el acuerdo para la renovación está cerca), en Trigoria la confirmación de Sergio Oliveira y hoy es probable. Y también que continúen Smalling e Ibañez, en los que la empresa y el propio Mourinho pretenden volver a centrarse al menos para el año que viene.
El punto central es Zaniolo. La intención es llegar a un acuerdo para la renovación del contrato independientemente de las ofertas de otros clubes, para que la Roma tenga más poder en cualquier negociación. Pero la discusión cobrará vida en los próximos meses, cuando el número 22 deberá demostrar en el campo que merece el dinero que pide. Muchos, más o menos los garantizados a Abraham y Pellegrini, que alcanzan ambos los 6 millones netos gracias a las primas «fáciles». Y si a alguien se le ocurre hacer una propuesta tentadora, todas las partes involucradas la considerarán. Pero por tentadoras nos referimos a cifras a partir de los 50 millones de euros. Y de momento se le han escapado dos serios pretendientes a Zaniolo: la Juventus contactó con su agente antes de contratar a Vlahovic y ahora es poco probable que pueda embarcarse en otra inversión tan costosa, a la par del Tottenham, donde un gran admirador del joven como Paratici trabaja eligió a Kulusevski durante al menos 18 meses. Capítulo aparte es Mkhitaryan: con él se decidirá al final de la temporada si seguir un año más o decir adiós.
Mientras tanto, Veretout parece destinado a la salida. Las conversaciones sobre la renovación se han estancado y el agente lleva meses haciendo contactos con varios clubes. Quien presente la oferta adecuada encontrará una puerta abierta a Roma. Lo mismo ocurre con Cristante, El Shaarawy, Karsdorp, considerados transferibles. También se buscará alojamiento para Kumbulla, Carles Pérez, Diawara y Darboe, por no hablar de los posibles retornos de sus respectivos préstamos de los Kluivert, Florenzi, Villar y Olsen. Bajo escrutinio hasta el final de la temporada esta Maitland-Niles.