Lorenzo Pellegrini parece tener la serenidad de quien está llamado, en virtud de sus habilidades y vocación, a ser líder siempre y en todo caso. Precisamente por eso el regreso como titular ante el Sassuolo quizás, a pesar del óxido acumulado tras el mes de parón por la última lesión, fue la mejor noticia que este opaco partido a domicilio trajo una dote a los giallorossi.
Ante el Verona, la Roma también contará con el capitán en el Olímpico, confiando en que -con Pellegrini- el equipo de Mourinho está asegurando un formidable ritmo de goles y asistencias. En 22 partidos disputados hasta el momento, Lorenzo ya ha marcado 9 goles y ha dado 5 asistencias. Todo en 1719 minutos jugados. Números de máximo goleador, útiles para volver a encarrilar el acorazado Giallorossi y preparar de la mejor manera posible los play-offs de la selección nacional para el Mundial. Y que Mancini se preocupa por Pellegrini, también se puede entender por el hecho de que lo quiso con él en Coverciano en el internado de enero, a pesar de estar lesionado.
Mourinho y el entrenador italiano parecen tener diferentes enfoques metodológicos. “Mourinho te da algo que, si no tienes, igual te sale –explicó Lorenzo a La Gazzetta dello Sport-. Mancini te da tranquilidad, así que arriesgas una jugada que de otro modo no arriesgarías. Mourinho pide mucha verticalidad, Mancini, quizás, también por su estética de excampeón, busca más posesión de balón para tener el juego controlado. Una vez, por ejemplo, estábamos haciendo un ejercicio en Coverciano y nos llamó a todos en medio del campo. Pensé: ‘Ahora nos está regañando’. En cambio, nos dijo: ‘¡Chicos, pero ustedes son muy buenos! Tienes que creer más en si mismo’. Así, Mancini comunica tranquilidad”.
Hablando de tranquilidad, la afición de la Roma habló mucho de los árbitros. “En cambio, tenemos que dar un paso atrás, porque nadie está enojado con nosotros -dijo-. Yo también me he dejado llevar demasiado lejos por mis actitudes. Eso sí, espero que episodios como el del Milan (penal no dado, ed) no se repitan, porque esperamos que todo con el Var sea perfecto, pero hay que empezar a tener una mejor actitud con los árbitros«. Palabras que parecen de un capitán de toda la vida, fruto de una sabiduría que se ha estratificado a lo largo de los años. En cambio esta es solo la primera temporada que Pellegrini arranca con el brazalete, que el año pasado heredó de Dzeko.
Probablemente, el hecho de haber tenido dos «maestros» como Francesco Totti y Daniele De Rossi ayudó a Lorenzo a crecer rápidamente. Y cuando le preguntan si no le parece extraño verlos fuera de Roma, responde sinceramente: “Creo que es extraño para todos. Eran dos leyendas y por la relación que tuve con ellos digo que me gustaría verlos todos los días en Trigoria. Pero también creo que hay que respetar las elecciones que han hecho”.