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Pellegrini se entrena de manera individual y estaría en fuerte duda su presencia ante el Betis; prevista su vuelta ante Lecce

No son las mejores noticias posibles, pero probablemente se temía algo peor, escribe Massimo Cecchini en La Gazzetta dello Sport.

De hecho, los exámenes a los que fue sometido ayer Lorenzo Pellegrini no arrojaron lesiones musculares, sino un estado genérico de sufrimiento en el flexor que será monitoreado. Eso hace pensar que el jueves ante el Betis Sevilla, pese a lo delicado del partido, el centrocampista giallorossi no jugará. Luego, en los días posteriores al partido de la Europa League, las condiciones del capitán dejarán claro si convendrá utilizarlo el domingo contra el Lecce o reservarlo para tenerlo seguro disponible en el Partido del próximo jueves a domicilio en Sevilla, que podría decidir la suerte de un grupo que para los giallorossi no se planteó de la mejor manera posible tras la derrota en su debut a domicilio ante el Ludogorets, que complicó los planes de gestión de José Mourinho.

Hoy y según Il Tempo, el capitán giallorossi se entrenó de manera individual en el entrenamiento matutino de Trigoria. Lorenzo que se ejercito individualmente, lejos de sus compañeros, verá su condición física será evaluada día a día. Para él un problema en el flexor de la pierna izquierda, el mismo que le había obligado a dejar la concentración de la selección. Su presencia, por tanto, está en duda para el partido contra los españoles.

En dos días, sin embargo, el técnico portugués debería reponer a Tammy Abraham entre los titulares, de igual forma podría haber un relevo entre Zalewski y Spinazzola. No se descarta que Kumbulla pueda sustituir a uno de los tres centrales, que han estado jugando casi siempre hasta ahora, pero dada la dificultad del partido parece poco probable que el técnico portugués decida dejar en el banquillo a Smalling, que está en un estado de forma deslumbrante. Sin duda, Matic y Cristante trabajarán horas extras, mientras que el Special One cuenta naturalmente con Dybala, aunque el manejo del delantero argentino siempre es extremadamente delicado dado el valor del jugador.

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