Después de las celebraciones por la victoria de la Copa del Mundo, es momento de regresar a sus respectivos clubes para los jugadores de Argentina. Esta mañana ha sido el turno de Paulo Dybala. La Joya aterrizó en la mañana de este jueves en Roma, en el aeropuerto de Fiumicino, dispuesto a volver al trabajo con sus compañeros.
Varios fotógrafos e incluso algunos aficionados saludaron el regreso a Italia de Dybala, quien se detuvo a firmar algunas camisetas, no solo de los giallorossi, sino también de la albiceleste. El argentino, que había volado al Mundial tras jugar unos minutos ante el Torino, recuperándose de una lesión, volvió a la capital italiana con un Mundial bajo el brazo.
A pesar de haber jugado muy poco (apenas diecinueve minutos entre semifinales y la final), Dybala consiguió hacerse decisivo en la gesta de la Scaloneta, al marcar su propio penalti en la final ante Francia. Ahora el número 21 está listo para volver a trabajar con Mourinho, para estar listo para el regreso a la liga, previsto para el 4 de enero, que verá a la Roma recibir al Bologna de Thiago Motta.
Pese a volver antes de lo esperado a Trigoria Paulo Dybala no entrenó con el grupo según cuenta Skysport, sino que hizo entrenamientos personalizados. Por ahora, sin embargo, el argentino no parece ser duda para el partido contra el Bologna del 4 de enero.
El equipo de Mourinho no cumplió del todo las expectativas en la primera parte de la temporada. De momento, de hecho, son séptimos con 27 puntos. El mes de enero será muy importante para los giallorossi. El día 4 el rival será el Bologna y en solo cuatro días la Roma irá a San Siro para jugar contra el Milan. Luego, el 12 de enero, se enfrentará al Génova en casa por los octavos de final de la Copa de Italia.
