Mourinho no se toca. El técnico tiene carta blanca, es el plenipotenciario de todo el ámbito deportivo de la Roma según los reportes de Corriere dello Sport. Incluso tras una de las peores actuaciones de la temporada, la titularidad está del lado del técnico, que en junio dará la vuelta al equipo para intentar empezar (casi) de cero. En la mediocridad actual, el técnico ha optado por potenciar la compacidad del grupo. En ciertos momentos él también parece resignado a la mediocridad, pero logra desviar bien la atención de las carencias tácticas del equipo. Además de la propiedad, la afición está toda de su lado. Seguro que Mourinho no esta en peligro. Nunca se arriesgará durante toda la duración del contrato de tres años. Los Friedkins lo impusieron, fue una elección que fue más allá de los algoritmos y compartida solo más tarde con Tiago Pinto. Es la única decisión real que han tomado en el área deportiva desde que llegaron. Tras la derrota ante Inter, Mourinho destacó la compacidad del equipo («somos un grupo unido») para bajar la tensión tras su exabrupto al final del partido de San Siro, desvelado por el Corriere dello Sport-Stadio.
La elección de los Friedkins, en particular de Dan, de apostar por Mourinho fue una elección fuerte, realizada en un momento de gran depresión para todo el entorno giallorossi. Depresión que no se encuentra en este periodo, a pesar de los siete puntos menos que la temporada pasada y las once derrotas de la temporada. Los Friedkins tienen contacto directo y frecuente con el entrenador, con quien hablan en inglés. Le conceden al portugués todas las atenuantes del caso y creen que los resultados se pueden empezar a ver a partir del año que viene. Mourinho solía usar palabras duras hacia los jugadores para motivarlos, para provocar una reacción. Los dueños de la Roma nunca tienen contacto directo con el equipo, nunca los tuvieron ni en los peores momentos de la temporada. Después de la derrota con Bodo, por ejemplo. Delegaron en Mourinho todo lo relacionado con la parte deportiva de la empresa. The Special One influye en el mercado más que cuando llegó, sin depender únicamente de algoritmos a la hora de buscar jugadores.
Los Friedkins están planeando una temporada de transición. Sobre Fonseca había dudas desde su llegada, pero la vara de medir a Mourinho es otra. Su reconocido liderazgo ha evitado muchos problemas a la sociedad. Si los resultados no llegan (séptimo puesto en la liga, fuera de la Copa de Italia), ahí está Mourinho que cataliza la atención y es un elemento de garantía para la afición, convencida de que como siempre ha triunfado en su carrera también lo será. construyó en Roma una alineación ganadora. Sea paciente.