Ayer Mourinho empezó a familiarizarse con el centro deportivo Trigoria, escribe Gianluca Piacentini en el Corriere della Sera. El técnico y su staff llevan mucho tiempo discutiendo cómo montar la obra y están «intentando cambiar algunas cosas, para que los espacios sean más adecuados que nuestras ideas y necesidades».
El portugués aprovechará estos cinco días de cuarentena para instalarse pero también para conocer a toda la plantilla y personal que trabaja cada día en el Fulvio Bernardini en cuyo interior, con la máscara y respetando la distancia, puede andar libremente y encontrarse con cualquier persona. Incluidos los jugadores, al menos los que han ido a Trigoria para trabajar y estar listo para el técnico cuando comience la preparación real.
Después de muchos contactos telefónicos, hubo se dio la primera reunión oficial con Zaniolo, Pellegrini, Mkhitaryan, Smalling y Kumbulla, quienes llegaron a Trigoria por la mañana, mientras que por la tarde También apareció el CEO Guido Fienga. En estas primeras horas de su aventura romanista Mourinho siguió constante temido por un equipo de rodaje que lleva dos semanas siguiendo sus viajes: desde la preparación de su salida de Portugal, hasta el aterrizaje en Ciampino y luego en Trigoria, con la multitud y el saludo desde la terraza, hasta sus primeros entrenamientos con la Roma. Todo esto se convertirá en una película documental, esta vez en tonos amarillos y rojos, que será producida por la casa productora cinematográfica de Dan Friedkin.