«Tú otra vez». Este puede haber sido el primer pensamiento de José Mourinho después de descubrir el nombre del árbitro encarado de pitar el Juventus-Roma, escribe Emmanuele Zotti en Il Tempo. Daniele Orsato dirigirá el gran partido en el Allianz Stadium: no un colegiado cualquiera para el Special One, que en el pasado tuvo más de un problema con el árbitro de la sección Schio. De hecho, de las tres expulsiones del portugués durante su carrera en la Serie A, dos son obra de Orsato, que mostró la tarjeta a Mourinho durante un Cagliari-Inter y un Inter-Fiorentina.
Los desacuerdos entre ambos surgieron precisamente en el partido del 15 de marzo de 2009 en San Siro, cuando el técnico protestó reiteradamente contra el árbitro tras una falta no sancionada contra el entonces alumno Santon. Una expulsión que no le costó a Mourinho una descalificación -se salió con una amonestación y una multa de 10 mil euros- pero que marcó el inicio de una relación conflictiva con el árbitro veneciano.
Las últimas chispas entre los dos se remontan a 2014 en la Champions League, cuando el italiano llevo las acciones del Maribor-Chelsea enfureció a Mourinho: “Tengo una larga historia con Orsato que se remonta a cuando estaba entrenando en Italia. No quiero hablar de él ”.
Para entender si la voluntad del técnico se ha mantenido igual, habrá que esperar a la rueda de prensa previa al partido, pero tras la expulsión de Pellegrini en el Roma-Udinese y las decisiones del arbitro que sancionaron a los Giallorossi en el derby, el de los árbitros se considera un tema delicado. Especialmente después de la designación de ayer.
