Tiago Pinto se tomó unos días de descanso en Portugal aprovechando el parón de selecciones. Pero se mantiene al tanto de todas las novedades de los jugadores de la Roma, en particular de Georginio Wijnaldum, que pasa su primer período de convalecencia en Países Bajos según cuenta hoy Corriere dello Sport.
Según el cronograma establecido hace un mes, luego de la terrible lesión en la tibia, se espera un control clínico e instrumental dentro de las primeras cinco a seis semanas del accidente. Así que Wijnaldum regresará pronto a Roma para que el cuerpo médico pueda evaluar su evolución. Wijnaldum aprovechará el parón otoñal para ponerse en forma y convertirse en enero en el principal refuerzo de la Roma, casi cinco meses después del fatal choque que se produjo en un entrenamiento con el joven Félix.
Si pudiera regresar inmediatamente después de la Copa del Mundo, Wijnaldum todavía tendría por adelante 23 partidos de liga más al menos uno de la Copa de Italia y, con suerte, al menos un par más de la Europa League. En definitiva, tendría tiempo para dejar huella en la Roma, a la espera de que se discuta su futuro con el Paris Saint-Germain: según los acuerdos de verano, el derecho de compra de unos 10 millones a favor de la Roma es gratuito. Pero es posible que los clubes decidan negociar una fórmula diferente: al fin y al cabo, Wijnaldum, nacido en 1990, es aún lo suficientemente joven como para merecer nuevas oportunidades.
Mientras tanto, Mourinho espera llevarlo a Japón, donde el equipo hará una gira en noviembre para no romper el ritmo entre el torneo inaugural y el de clausura. Su implicación en el grupo, al que acaba de conocer, ayudará a acelerar la integración definitiva. Para Gini no sería como participar en el Mundial con Holanda, un objetivo dolorosamente desdibujado, sino un paliativo que le ayudaría a recuperar su condición.