Para José Mourinho el parón generado por los partidos de las selecciones nacionales, si desde el punto de vista formativo supone un problema, a nivel personal constituye la oportunidad perfecta para volver a casa con la familia.
De hecho, tal y como informa La Gazzetta dello Sport el Special One dio al equipo dos días de descanso y aprovechó para coger un avión desde Fiumicino. En realidad dos. Por ello desde este viernes el portugués regresó a su tierra natal, a Setúbal, para pasar un rato con su madre Julia. Hoy, sin embargo, José Mourinho se ha trasladara a Londres, donde viven su mujer y sus hijos.
Un refugio seguro donde desconectar para el técnico de la Roma, que en las próximas horas tendrá que pensar en cómo trabajar con los pocos jugadores que quedan en Trigoria, con todas las posibles ausencias -de Pellegrini a Aouar- que afrontar ante el Empoli .
