José Mourinho no está satisfecho, quiere superar todos los límites, asumir nuevos retos y conquistarlos. Para ello necesita a sus hombres, un equipo que esté a la altura de los objetivos que se ha marcado el club: la clasificación para la Champions. Porque el Special One, solo, no puede hacer milagros, escribe Gianluca Lengua en Il Messaggero.
Por eso pidió lo imposible: una plantilla lista para el 5 de julio, primer día del encuentro en Trigoria. El principal temor reside en el centro del campo: Mou ha perdido a Mkhitaryan, a Oliveira y pronto se despedirá de Veretout.
Ha llegado Matic y volverá de la cesión del Villar. Mientras tanto, el tira y afloja con Sassuolo por Frattesi no da señales de desbloquearse. El internacional italiano ha llegado a un acuerdo por el contrato, pero los emilianos no le sueltan por menos de 30 millones. Desde Trigoria ofrecen 22/25 de los que hay que rebajar un 30%.
En el ataque, en cambio, la suerte de Zaniolo parecería sellada: hubo una una reunión entre Pinto, Vigorelli y Cherubini en la que la Roma se habría abierto a la posibilidad de una cesión con obligación de compra. Pero sin bajar las exigencias sobre el precio, que se fija en 45/50 millones. Los bianconeri, por su parte, respondieron proponiendo algunas piezas entre los que se encontraban Kean, Arthur y Ramsey, pero a Trigoria no interesa.