Pese a que el compromiso es a mitad de semana, casi dos mil giallorossi han seguido a la Roma, que juega hoy en Sevilla ante el Betis, según informa La Gazzetta dello Sport.
El resultado de la ida, de hecho, no desanimó el miniéxodo y por eso aún este jueve los chicos de Mourinho tendrán a quienes se harán oír en la grada, pese a los vítores españoles -como había subrayado el propio Special One antes del primer encuentro- es particularmente cálido. Precisamente por eso será útil contar con el apoyo romanista a Roma.
Gran parte del destino europeo de los giallorossi pasa por el desafío programado a las 18.45 horas en el Estadio Benito Villamarín, donde se esperan unos 50 mil espectadores, entre ellos la representación de los giallorossi, la mayoría de los cuales han llegado a la ciudad a estas horas. En la soleada Sevilla también está el vicepresidente Ryan Friedkin, que ha pasado a saludar a la delegación giallorossi en el centro de la ciudad (Tiago Pinto estará en el almuerzo que organiza la Uefa entre los clubes) y dispuesto a asistir al partido en las gradas.
Sin Paulo Dybala, lesionado y el sancionado Nicolò Zaniolo, Mourinho está listo para colocar a Lorenzo Pellegrini detrás del tándem de ataque Abraham-Belotti. Arrancando con la mejor alineación posible para encontrar los goles perdidos e intentar traer a casa puntos clave para la clasificación a los octavos de final de la Europa League.