Un recuerdo imborrable que guardado para siempre, la emoción indescriptible de vivir de cerca un Olímpico lleno de pasión, a pesar de un resultado despiadado y difícil de tragar, escribe Andrea Di Carlo en La Repubblica. Pero la debacle de la Roma de José Mourinho ante el Inter de Inzaghi representa el primer paso, aunque diminuto pero importante en el fútbol para los grandes de Maissa Codou Ndiaye. Defensa de la clase 2002 de la Roma Primavera de Alberto De Rossi, le ha llegado su primera convocatoria al Primer Equipo.
Premio al crecimiento constante que ha demostrado el jovencito senegalés en los últimos años con la camiseta Giallorossi. Visto en septiembre de 2018 mientras regateaba en la calle por un observador de Afro Napoli, un club amateur multiétnico en Nápoles (la ciudad donde el joven, solo, se había mudado y estaba alojado en un refugio para menores), llegó a Trigoria unos meses después, consiguiendo registrarse en el club Giallorossi recién en octubre de 2019.
Físicamente fuerte, es un defensa central capaz de jugar tanto en línea de tres como de cuatro: gracias a su velocidad, reactividad, explosividad y fuerza, sobresale en el duelo aéreo individual y en la defensa a campo abierto, incluso algunos especialistas le compararon con Koulibaly, pero también en la fase de salida con el l balón a mostrando una buena visión del juego y la capacidad de elegir siempre la mejor opción para iniciar el juego.