El Milan-Roma corre el riesgo de ser un partido condicionado por la actuación de los dos porteros. La referencia a los dos porteros, Maignan y Svilar, no es técnico sino táctico. Es decir, ligado a su capacidad para jugar con los pies cuenta Corriere dello Sport.
Advertencia: no atajarr con los pies, porque podría parecer un insulto. Pero jugar con los pies sí, lo que ciertamente no es una ofensa, de hecho en el fútbol actual es un elogio. Tanto el francés como el serbio podrían convertirse, mediante un maquiavélico juego de jugadas y contraataques, en los únicos hombres sobre el terreno de juego sin marcador. Y, por tanto, su capacidad de jugar con los pies podría dirigir, condicionando, la marcha de la maniobra de su equipo.
Svilar, en este sentido, va mejorando partido a partido, por lo que Mister De Rossi le llama cada vez más a la acción a la hora de planificar la acción ofensiva. Sin embargo, para evitar que la construcción desde el fondo se convierta en un amén de la destrucción desde el fondo, es fundamental contar con un portero que sepa manejar el balón con pies de terciopelo. Y Svilar eliminó del campo a Rui Patricio (también) porque tiene los pies menos afilados que los portugueses.
