Por un lado, hay más de 35 mil abonados ya confirmados y la meta de superar los 40 mil está al alcance. Por otro lado, los chats y los mensajes de aficionados preocupados: los silencios del club, la compra del Everton en la prensa británica, el Independent que habla de una inyección de capital de 200 millones de libras por parte de los Friedkins, el cierre del EUR sede y el traslado, entre mil dificultades, de todo el personal a Trigoria, como escribieron hoy Gianluca Lengua y Fernando Magliaro en Il Messaggero.
Desde hace semanas circulan rumores sobre esta operación por la que, según medios británicos, los Friedkins ya han desembolsado 200 millones de libras para devolver un préstamo e inyectar capital líquido en las arcas del club inglés para una operación muy similar a la que se hizo en Roma, en el momento del cambio con el anterior propietario, James Pallotta. En total, la operación le costará al grupo Friedkin 650 millones de euros. Dinero que se destinará en parte a cubrir la enorme deuda que tiene contraída el club inglés.
Las garantías sobre la centralidad de la Roma en este tipo de empresa conjunta internacional (los Friedkins también son propietarios de Cannes, en Francia, que sin embargo juega en la Serie B francesa) se han sucedido unas a otras, pero todavía está por ver si han sido suficientes para disipar las dudas de los fans