«El día siguiente, se hace una mirada al futuro», escriben Carlo Laudisa y Massimo Cecchini en La Gazzetta dello Sport.
Las conversaciones que tuvieron lugar ayer en Trigoria, tras la derrota ante el Napoli, pusieron a Paulo Fonseca de nuevo con la valija en la mano y en la puerta de salida.
El problema, no se limita solo al desafío del Olimpico, sino también a cómo la Roma se alejaba aún más del objetivo de la temporada: estar en la Champions. Los dirigentes, que se «retroalimentan» del núcleo del equipo, saben que los mismos jugadores tienen dudas sobre la formación que se alineó ante el equipo de Gattuso, así como sobre la preparación física.
Eso son mencionar el ahora endémico problema contra los rivales directos, pues en choques contra los grandes hay un récord de 0 victorias, 3 empates y 5 derrotas esta temporada. Precisamente por eso -a la espera de la Europa League, que también podría terminar en gloria- la posición del técnico portugués va vacilando, a pesar de contar con el fuerte apoyo del director general, compatriota Tiago Pinto.
El primer candidato es Massimiliano Allegri, quien también es deseo de múltiples banquillos. El club sabe que la disponibilidad que se ha dado por el entorno de Max es la misma que se brinda a otros clubes. El proyecto de los Friedkin no va a construir un «equipo instantáneo» para ganar de inmediato (el pasado mes de junio las deudas fluctuaron en torno a los 300 millones, perdió 202 y además con la próxima facturación será difícil superar los 150 millones), pero la idea hoy que se trabaja en club, es la de hacer crecer la Roma centrándose en los jóvenes.
En este sentido, no se descarta ninguna posibilidad, los algoritmos de evaluación dicen que esa es la dirección y, si hace uso de esa línea de trabajo (apoyándose también en los consejeros) se da mucha importancia a la figura de Maurizio Sarri, que sería otro de los evaluados.
Perfiles interesantes como los de Juric (que gusta a varios clubes) y Nagelsmann, actual entrenador del Leipzig. Sin embargo, el alemán estaría en la «pole position» para ir al Bayern Múnich si Flick deja el club bávaro para incorporarse a la selección alemana.
Por ahora la idea del despido de Fonseca no está en lo más alto de la lista, pero las frases de Fonseca tras el partido sonaron casi a resaca.
.RPR.
