La Roma cree en ello. Porque la posibilidad de poner a disposición de José Mourinho a otro jugador top es concreta y los Friedkins -recién salidos de las celebraciones por la salida de la bolsa- quieren complacer al hombre que llevó al equipo a la conquista de la Conference League. Según Il Tempo propietarios dieron el visto bueno a Tiago Pinto para intentar fichar desde el Paris Saint-Germain a Georgino Wijnaldum: una misión complicada por el alto salario del centrocampista.
Un obstáculo importante, pero no insalvable por varias razones. En primer lugar la relación que estableció Dan Friedkin con la titularidad del PSG y, en segundo lugar, la capacidad demostrada por Pinto en saber sortear la posibilidad de poner faraónicos compromisos en el plato con soluciones creativas.
Como la cláusula de liberación insertada en el contrato de Dybala. También en este caso, de hecho, el director general busca un empalme económico que permita a la Roma fichar a un jugador que, hace tan solo unas semanas, parecía inabordable.
La forma más sencilla sería llegar a un acuerdo con los parisinos, que deberían contribuir al pago de parte del salario del jugador de 31 años y acceder a dejarlo ir cedido. Una solución que sigue siendo válida pero que no encanta a los franceses, que querrían venderlo por unas decenas de millones o al menos dejarlo pasar con la fórmula del préstamo con obligación de rescate.
Para comprar Wijnaldum, sin embargo, se requiere un esfuerzo importante por parte del jugador, que debería reducir mucho el salario para llegar a una cifra sostenible desde la Roma. Sin embargo, en caso de permanencia en Italia por al menos dos años, los giallorossi podrían contar con el alivio del decreto de crecimiento.
