“Agarrense, que vienen curvas” es lo que deben de estar pensando los Friedkin en estos momentos. Trás la oficialidad de la decisión del Juez Deportivo de infligir a Roma la derrota en la mesa ante el Verona, los rumores respecto a los problemas dentro de la directiva giallorossi no han hecho nada más que aumentar.
Según medios cercanos al conjunto de Paulo Fonseca, parece ser que Friedkin quiere resolver de inmediato las diversas turbulencias que socavan la tranquilidad del club. Una “supuesta revolución” que empezaría este próximo octubre. El objetivo de los dueños estadounidenses es que todos los engranajes se muevan en la misma dirección en el futuro, y parece que no les va a temblar la mano. Desde Paulo Fonseca al director deportivo, pasando por los distintos roles en ventas y marketing, todos parecen estar advertidos y son conscientes de la nueva dirección que Dan pretende dar al club.
Una nueva dirección en la que puede estar presente Francesco Totti. Tras la entrevista a “Roma TV” en la que admitió querer «hacer cosas bonitas», los rumores sobre la posible vuelta del eterno capitán vuelven a tomar fuerza.