El camino del Olímpico se retoma con cierta frecuencia, el de Trigoria se lo sabe de memoria y podría volver a ser el más trillado. Tras el hielo con la administración de James Pallotta, ahora Totti es una persona bienvenida en todos los asuntos romanistas, como demuestran las continuas muestras de cariño en las redes sociales oficiales del club, escribe Francesco Balzani en el diario Leggo.
Los Friedkins están fascinados con él, Pinto lo estima y ha habido un sentimiento duradero con Mourinho. El Special One agradecería tener a una persona tan importa para el club a su lado como ya la ha tenido en experiencias pasadas (en el Inter con Oriali y en la Real con Redondo y Karanka). ¿Es posible una devolución? Ahora sí, y algo se empieza a mover de cara a la próxima temporada. Los indicios son muchos: el papel de embajador del patrocinador principal de los Giallorossi, la presencia ya fijada en el estadio y la necesidad de ampliar la gestión deportiva.
El ejemplo a seguir es el de Maldini en el Milan convencer a los Friedkins de que la experiencia y el carisma no se encuentran en el software. Francesco se ocupa de la Dirección de CT10 donde ha florecido Volpato, pero las ganas de volver a respirar Roma cada día han vuelto con fuerza.
Ahora todo dependerá de la voluntad de Francesco de volver, y de la directiva de encontrarle un puesto donde se sienta a gusto y tenga una capacidad de gestión a su altura, y sobre todo la autonomía que pidió en el pasado, aunque esto último parece un poco más complejo siendo los Friedkin tan metódicos y cautos. Lo cierto es que algo se mueve.
