En estas horas Paulo Fonseca está descansando en su casa, en Portugal, después de pasar diez días en Ucrania, en un balneario en el Mar Muerto y Kiev, con la familia de Katerina, su esposa. Mientras tanto, sin embargo, el portugués también empieza a pensar en su segunda temporada en la Roma, la que estará en su mano en menos de una semana, a partir del 27 de agosto, cuando los Giallorossi se reunirán en Trigoria para preparar la nueva estación.
Y Fonseca también sabe que esta vez no puede equivocarse, la Roma debe subir el listón, el club, después de un año de aprendizaje con el fútbol italiano, espera una mejora de parte del portugués. Por eso Fonseca quiere empezar fuerte de inmediato, para intentar enviar un mensaje a todos y canalizar la temporada de inmediato por los caminos correctos. Primero, sin embargo, Fonseca tendrá un par de charlas importantes que considera fundamentales. Para entender todo un poco más claro en su vuelta a Trigoria, según cuenta Andrea Pugliese en la Gazzetta dello Sport.
LAS DOS CONVERSACIONES— A principios de la semana que viene, por tanto, Fonseca estará de regreso en Roma para empezar a planificar y trabajar. No obstante, lo primero que hará será hablar con Guido Fienga, el director general Giallorossi también designado por Dan Friedkin para llevar a cabo el plan industrial de la nueva empresa. Fienga ya habría tranquilizado al portugués sobre su futuro antes de las vacaciones, aún asegurándole plena confianza por parte del club. Lo que reiterará incluso en esta circunstancia, con Fonseca que, sin embargo, quiere comprender algunos pasos clave: ¿es una confianza ilimitada o cronometrada? ¿La empresa tiene ganas de apoyarlo hasta el final? ¿Son ciertos los rumores sobre el deseo de poner un estratega en su personal a su lado? Esto también se comentará en la entrevista, con el técnico de Giallorossi que obviamente pretende tener el máximo apoyo del club, además de tener una figura fuerte dentro y fuera de Trigoria (con los jugadores, pero también con el entorno).
INFORME SINCERO— Luego Fonseca hablará cara a cara también con Edin Dzeko, después de que el último contacto con el delantero centro bosnio fuera el posterior al partido en Duisburg, donde la Roma fue barrida por Sevilla y Edin allí puso el dedo en la herida: » Preparamos mal el partido y en el campo no entendimos que teníamos que cambiar la forma de jugar «. Acusaciones dirigidas a Fonseca, las cuales el portugués dejó aún lado sin rencor, pero cuya génesis quiere comprender. ¿Dzeko realmente sigue confiando en Fonseca? La impresión es positiva, porque la relación entre ambos siempre ha sido clara y sincera, basada también en la estima mutua. Pero quizás también sea necesario reiterarlo, cara a cara. Y esta entrevista es la oportunidad adecuada para reiniciar de la mejor manera posible.
