En los últimos seis partidos sólo ha sido titular una vez. En los últimos tres de los últimos tres entrenadores anteriores (Mourinho, De Rossi, Juric) siempre fue al banquillo. Al final de un 2024 lleno de tristezas, Lorenzo Pellegrini espera tener una nueva oportunidad el domingo ante el Parma. El miércoles, sonriendo por la participación mientras sus compañeros acosaban a la Sampdoria, alcanzó de forma anónima la marca de 300 partidos con la Roma. Que el domingo tiene previsto celebrar dignamente contra el Parma.
Luego, en enero, con el mercado abierto, evaluará el futuro junto con el club: antes de que Dybala se ganara el favor del Galatasaray, él también había recibido señales de interés por parte de Turquía. Si llegan propuestas interesantes, Pellegrini y la Roma las examinarán detenidamente. Nunca como esta vez, la incertidumbre reina en Trigoria cuenta Roberto Maida este viernes en el diario Corriere dello Sport. Si recupera la centralidad técnica, Pellegrini detendrá cualquier negociación de raíz. Por el contrario, dará a su agente el mandato de buscar una solución, como le ocurrió a Alessandro Florenzi en enero de 2020, cuando acababa de ser nombrado capitán.
Respirando el aire de Trigoria, sin embargo, comprendió que el contrato, que expira en 2026, ya no es sostenible en términos salariales para un club que corre el riesgo de no participar en las próximas copas de Europa. Y tras el anunció de los Friedkins, que anunciaron una revolución en enero, su posición ya no es tan sólida. Ya nadie puede descartar nada.
La Roma necesita un delantero suplente y el nombre de Raspadori (que está encontrando poco espacio en el Nápoles) es uno de los más sonados de cara al mercado de fichajes de invierno. Según cuenta el portal Tuttomercatoweb, el club giallorossi está trabajando en un intercambio con el Napoli, que incluirá a Lorenzo Pellegrini.
El capitán tiene pocas posibilidades de renovar su actual contrato (actualmente cobra 4 millones + 1 bonus) y sería uno de los primeros en marcharse en la revolución anunciada por los Friedkins. La Juventus también quisiera al delantero italiano a cambio de Danilo pero la negociación es mucho más complicada por varios factores. A Conte le gusta mucho Pellegrini y con él también tendría una alternativa a McTominay.
