Más que un manifiesto, es una promesa. Hecha con el corazón, como siempre ocurre cuando se trata de la Roma. Lorenzo Pellegrini – escribe Andrea Pugliese en La Gazzetta dello Sport – quiere seguir vistiendo amarillo y rojo, con la esperanza de conseguir la revancha que anhelaba esta temporada y que por mil motivos no llegó.
Y lo dijo claro el capitán de la Roma ayer con un post publicado en su perfil de Instagram, junto a las distintas pancartas expuestas el domingo por la noche y dedicadas a él. «Gracias a todos por apoyar al equipo y a mí anoche en el Estadio Olímpico —palabras del centrocampista giallorossi compartidas en Instagram—. Ahora solo falta la última batalla de la temporada que debemos jugar juntos. Hoy es un día menos para volver a jugar y luchar por nuestros colores. Trabajaré duro para estar en mi mejor nivel la próxima temporada«, con corazones amarillos y rojos. Una publicación que también fue bien recibida por la afición, que mostró su apoyo durante el Roma-Milán.
El domingo, Pellegrini estaba en el banquillo con muletas, menos de 48 horas después de ser operado en Finlandia del tendón recto femoral del muslo derecho. En la Curva Sud, primero salió un «Lorenzo Pellegrini siempre a tu lado», luego las tres pancartas con Totti, De Rossi y el propio Pellegrini abrazando a Ranieri.
Por lo tanto los rumores sobre una posible salida en verano parecen por tanto desvanecerse, también a causa de la lesión, a pesar de que el contrato del futbolista italiano con la Roma expira en el verano del 2026 y todavía no parece haber novedades sobre la renovación.