Una vez más Roma-Feyenoord, el desafío de nunca acabar. Esta es la eliminatoria que salió de la urna de Nyon para los playoffs de la Europa League: los Giallorossi jugarán el partido de ida el 15 de febrero en el De Kuip de Rotterdam (18.45 horas) y el partido de vuelta una semana después, el 22 (21.00 horas), en el Olímpico. Por tercer año consecutivo – con 5 partidos se convertirá en el partido de eliminación directa que más veces se ha jugado en una gran competición europea en los últimos 3 años – los Giallorossi se cruzarán con los neerlandeses, y si en casa Roma seguramente habría preferido otro rival, incluso en Rotterdam no habrían estado contentos con la pareja, dado que todos los precedentes favorecen a la Roma.
La final de la Conference League ganada en Tirana fue el momento más feliz, pero también el paso de la ronda de la temporada pasada a los cuartos de final de la Europa League dio una gran satisfacción a los Giallorossi, que hasta el minuto 89 estaban fuera de la competición, antes de eso el gol de Dybala envió el partido a la prórroga, que luego se ganó por 4-1. Al final del partido, Mourinho y Arne Slot no se dieron la mano: el portugués reprochó a su colega haber «visto demasiados partidos del Napoli y muy pocos partidos de la Roma«, respondiendo así a las observaciones de Slot sobre el buen juego expresado por el equipo entonces entrenado por Spalletti en comparación con los Giallorossi.
También en 2015, en dieciseisavos de final, el equipo entrenado en aquel momento Rudi García pasó de ronda, pero esa doble prueba quedó tristemente famosa por los daños causados por los aficionados neerlandeses a la «Barcaccia» de Bernini, situado en la Piazza di Spagna. Las muy malas relaciones entre ambos aficionados podrían provocar el cierre de los partidos fuera de casa por motivos de orden público asegura Corriere della Sera. Sin embargo, hay tiempo para tomar una decisión, dado que los partidos se jugaran en febrero: la Roma dará a conocer las modalidades de venta de entradas en los próximos días.
