En la era Friedkin se ha producido un claro punto de inflexión en las estrategias para el sector juvenil: muchos jugadores crecidos y formador en Trigoria ahora no sólo son un verdadero activo para el mercado, sino también verdaderos diamantes en bruto que el club quiere hacer brillar para cultivar potenciales campeones dentro de la casa.
Esto también se debe a las enormes inversiones, 50 millones, de la familia texana cuenta este lunes el Corriere dello Sport. Al fin y al cabo, si muchos clubes pueden hacerlo, incluso con sectores inferiores al de Trigoria, ¿por qué la Roma no puede hacerlo? El ejemplo más llamativo de esta Eurocopa es sin duda Nico Williams, que creció en el Athletic de Bilbao y hoy es un futbolista deseado por todos los grandes clubes.
Además de las palabras, como siempre, los hechos: la Roma llegó a la final con 4 equipos de 5, ganando un campeonato por ahora con la categoría Sub 17. Falta la final del Sub 15 (se jugará en Ascoli el día 25 contra el Genoa) pero por lo demás la Roma también ha enviado a la fase final a los equipos Primavera y Sub 18. Y si es cierto que se evalúan los sectores juveniles. Por caminos de crecimiento y no por trofeos, en Trigoria podemos mirar con orgullo e ilusión lo hecho este año y en temporadas anteriores.