Los kilómetros que separan a la Roma del partido a domicilio de mañana ante el Bodo Glimt son 3.727. La temperatura debe fluctuar entre uno y tres grados. El clima predice lluvia mezclada con nieve. Todas las condiciones a las que los jugadores romanistas no están acostumbrados. Hace exactamente quince años, el 20 de octubre de 2005, el equipo que entonces entrenaba Spalletti se fue aún más al norte, para jugar en el pesado y embarrado campo de Tromsoe. Prácticamente en el Círculo Polar Ártico. De hecho, el Cabo Norte no está tan lejos, y a esas temperaturas, para los que no están acostumbrados, el frío puede convertirse en una sentencia. Y pensar que el viaje más lejano ni siquiera fue ese.
A lo largo de los años, la Roma realmente ha jugado en el borde del mundo. El partido más lejano es también el más reciente: la temporada 2017/18, el plantel Giallorossi viajó a Bakú (a 4.455 km) por el partido de la Liga de Campeones contra el Qarabag. Partido ganado 2-1, imprescindible para alcanzar el primer puesto del grupo. El partido ante el Gaziantepspor en la 2003/04 está más cerca, aunque no lo parezca. A ‘sólo’ 3.375 km de Roma, se produjo en el campo de la selección turca la derrota por 1-0 en la Copa de la UEFA, resultado luego anulado en el partido de vuelta por la Roma. El partido fuera de casa ante el Shaktar, que ha sido una constante a lo largo de los años, ahora se considera un destino cercano en el imaginario colectivo, aunque los kilómetros que separan la ciudad ucraniana de Roma son 3.173.
Pero en octubre de hace quince años fue realmente una guerra que se libró en el campo de Tromsoe. El partido fue válido para la fase de grupos de la Copa de la Uefa y terminó 2-1 a favor de los Giallorossi, con goles de Kuffour y Cufré. La victoria llegó tras una derrota ante el Empoli y antes del derby ante la Lazio; situación casi similar a la de la Roma de Mourinho. Los Giallorossi vienen de la derrota en el Allianz Stadium ante la Juventus, a la espera del derby ante el Napoli de Spalletti. En ese momento fue el técnico de Certaldo quien dirigió a la Roma, que luego terminó ese campeonato segunda en la Serie A y finalista en la Copa de Italia.
