El amistoso de este domingo en Israel ante el Tottenham ha dado mucho que hablar. Mientras el equipo fue recibido con todos los honores por los organizadores, que pagaron a los dos equipos casi 200.000 euros cada uno para tenerles sobre el césped de Haifa, en Roma las protestas pro-palestinas se hacen sentir. Uno de los grupos históricos de la Curva Sud, los Fedayn. Ayer mostró otra pancarta en la capital italiana expresando su disconformidad con la elección de la empresa.
Mientras tanto, el equipo, siempre rodeado del cariño de un grupo de aficionados que patrullan frente al hotel del paseo marítimo, tuvo apretada agenda en la última jornada israelí: entrenamiento en Nethanya durante la mañana, luego comida y salida en autobús hacia Haifa. El traslado tardará aproximadamente una hora. A las 21.15 hora local (20.15 en Italia) tuvo lugar el encuentro ante el Tottenham, aplazado una hora por Shabat.
Según Corriere dello Sport, inmediatamente después del encuentro, el equipo regresó a Roma en un vuelo chárter desde Tel Aviv: este domingo, tras una noche de viaje, Mourinho y los jugadores tendrán el domingo libre para volver a los entrenamientos este lunes, a las 17:00.
