La búsqueda de entradas ya está abierta a pesar del parón de selecciones, la afición está dispuesta a llenar el Olímpico (como siempre) en los próximos partidos ante Udinese y Fiorentina por los ‘Sold Out’ números 42 y 43 de la era Mourinho. Los ingresos en las arcas del club, son un empujón extra para la Roma, que esta temporada más que nunca siente vital el apoyo de la afición: si fuera por ellos, sólo jugaría en el Olímpico.
Las dos caras del equipo Giallorossi que se divide entre el bien y el mal, entre local y visitante, como si el partido fuera de casa estuviera embrujado asegura este jueves Corriere dello Sport. Así, el desempeño del equipo en el Olímpico está entre los mejores del campeonato, mientras que el desempeño fuera de casa está en la parte inferior de la tabla. Casi como un descenso.
La Roma, contando sólo sus partidos en casa, sería tercera en la clasificación con 13 puntos (4 victorias, un empate y una derrota), sólo por detrás de la Juventus y el Inter (con un partido más en San Siro). A domicilio, sin embargo, es todo lo contrario, o casi. Desde el tercer puesto, la Roma descendiendo diez posiciones hasta el decimotercer lugar en la clasificación de partidos fuera de casa. Sólo una victoria, ante el Cagliari, luego dos empates y tres derrotas.
Cinco puntos conseguidos fuera de casa, sólo Sassuolo, Genoa, Verona, Lecce, Frosinone, Salernitana y Cagliari obtuvieron peores resultados: rendimiento de estos equipos que refleja más o menos la posición real en la clasificación. Siete goles marcados, nueve encajados: casi la mitad de los marcados y casi el doble de los encajados en el Olímpico.
Arriba en casa, pero a un fracaso lejos de la capital: una tendencia que la Roma debe mejorar para afrontar de la mejor manera posible la reanudación del campeonato y de la Europa League. Servette en Europa en Ginebra, luego Sheriff en casa (además de la ronda de la Copa de Italia), en cambio en el campeonato un calendario exigente con Udinese, Fiorentina, Napoli y Atalanta en el Olímpico, mientras que Sassuolo, Bologna, Juventus y Milan fuera. Los resultados positivos en casa no son suficientes, ahora la Roma necesita ganar los partidos importantes, incluso fuera, para cambiar la situación.