El destino reabre las puertas a la Roma: sí, porque en los cuartos de final de la Conference League, Pellegrini y sus compañeros podrán intentar vengarse de lo que había sido en la fase de grupos, a distancia de tres meses, cuando Bodo había puesto al equipo de Mourinho crisis.
Es la segunda vez en la historia que la Roma pilla en octavos de final a un equipo al que ya se ha enfrentado en rondas europeas: la primera, en la 2007/08 ante el Manchester United, no trajo muy bien a los giallorossi, luego eliminados en cuartos de final. Pero con respecto a los partidos de la fase grupal él Bodo a cambiado algo.
Cuánto ha cambiado del Bodo/Glimt
El campeonato noruego finalizó el pasado 12 de diciembre con la victoria del título para el conjunto amarillo y negro, y en los últimos meses el equipo sólo ha jugado la Conference League, preparándose para la nueva temporada que comenzará el 3 de abril con el partido ante el Rosenborg. Durante el mercado de fichajes de invierno algunos jugadores importantes abandonaron el Bodo, como Erik Botheim, que puso rumbo al Krasnodar. El delantero centro había marcado 15 goles la temporada pasada, luego siete goles y seis asistencias en competiciones europeas. A la Roma le había llegado incluso a marcar 3 goles entre el partido de local y visitante, con otras tantas asistencias en el doble desafío. El lateral izquierdo Fredrik André Bjorkan, el capitán Patrick Berg y el Pernambuco, ausentes en los partidos contra los giallorossi, también abandonaron el Bodo.
En cambio, han comprado Anders Konradsen (centrocampista) del Rosenborg, Brice Wembangomo (lateral) del Sandefjord, Runar Espejord (delantero titular) del Heerenveen, Gaute Hoberg Vetti (centrocampista) del Sarpsborg 08 y Japhet Sery Larsen (defensor) del Brann.
A pesar del parón del campeonato, Bodo mantuvo una excelente actuación, logrando primero vencer al Celtic en los playoffs, y luego eliminando al AZ Alkmaar en octavos de final. El equipo de Knutsen sigue jugando con su habitual 4-3-3, apoyándose sobre todo en las cualidades de los dos atacantes: Ola Solbakken, extremo del agrado de muchos equipos europeos, y Pellegrino. Ambos pusieron en aprietos a la Roma tanto en el ruinoso partido de Noruega como en el Olímpico en el empate atrapado por los giallorossi en la remontada por 2-2.
Además del equipo, el escollo de la Roma también es repetir el pesado viaje de 2826 kilómetros fuera de casa. Se jugará en Bodo, una ciudad poblada por unas 55 mil personas y ubicada en la parte norte de Noruega, justo más allá del Círculo Polar Ártico, donde el sol de medianoche ya es visible desde el 2 de junio hasta el 10 de julio. El equipo juega sus partidos de local en el estadio Aspmyra, que tiene una capacidad para alrededor de 8.000 espectadores.