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La Roma planea hacer tres amistosos a puerta cerrada en el inicio de la pretemporada en Trigoria; Mourinho sigue orientado a una etapa en Algarve

Diez días más y las puertas de Trigoria se volverán a abrir de par en par. De hecho, la reanudación de los trabajos en el centro deportivo capitalino, la primera jornada oficial de la Roma 3.0 de José Mourinho, se ha fijado para el 10 de julio. Y si, por un lado, el trabajo bajo el sol de la capital comenzará sin sobresaltos, con tres pruebas a puerta cerrada finalizadas pero con oponentes de modesto valor, el resto del programa de verano está por definirse, dado el enorme problema que supuso la cancelación de la gira en Corea del Sur, por el impago por parte de los organizadores de lo pactado con el club.

Tras la cancelación de los partidos con el Wolverhampton (el club inglés también comunicó la cancelación del viaje a Corea) y el Incheon Utd, la Roma volvió a sumergirse en el mar de propuestas que llovieron sobre Trigoria para recibir al conjunto giallorossi en periodo estival. Llegaron varias ofertas de Austria y Suiza, pero la montaña es un lugar que no siempre ha sido muy apreciado por el Special One.

La única preferencia del técnico giallorossi es el Algarve, con el problema de que las estructuras elegidas previamente por la Roma están ocupadas en las fechas que se plantean asegura el diario Il Romanista en su versión web. Esto se debe a que queda confirmado el desafío de Singapur el 26 de julio ante el Tottenham, por lo que la empresa busca destinos «geocompatibles» con el viaje a Asia. La decisión se tomará el lunes, para que todo pueda planificarse con la debida atención al detalle.

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