Cuando Monchi había quedado encantado con William Bianda, defensor que juega hoy en la Roma Primavera, no habría imaginado una actuación tan mínima. El ex director deportivo de la Roma lo fichó por 6 millones (más cinco bonos), también lo intentó debido a los rumores que circulaban en Francia sobre él: de hecho, todos lo compararon con Marquinhos y Varane.
La realidad, más de un año y medio después de su llegada a la capital, es otra. Alberto De Rossi no parece convencido, y mucho menos Fonseca para su uso en el primer equipo. El dinero que la Roma debe pagar por el salario del francés es demasiado: es de alrededor de 700 mil euros, desproporcionado en comparación con el resto de la primavera. Una cifra inadmisible dado el rojo actual en el balance. Según Chiara Zucchelli informó en «La Gazzetta dello Sport», el club está buscando un destino al defensor, esperando un préstamo en la Ligue 2 y luego revenderlo definitivamente. Sin embargo, el obstáculo del sueldo no será fácil de superar para los otros clubes y, con toda probabilidad, continuará con los muchachos De Rossi.
