Otra mejora, otro paso adelante. A la espera de los datos definitivos, escribe Andrea Pugliese en La Gazzetta dello Sport, ya podemos sonreír. Porque la salud del balance de la Roma es ciertamente mejor que en 2023. Los datos agregados, en porcentaje, nos hablan de una mejora de las cuentas de alrededor del 40% respecto a la temporada pasada. Gracias al trabajo realizado por los Friedkins y la directora general Lina Souloukou, encaminado a consolidar el club, pero siempre con la vista puesta en las cuentas.
En definitiva, respecto a años anteriores, se confirmó la tendencia del presupuesto 2022-23, que ya preveía una mejora respecto a las temporadas anteriores, con ese resultado operativo fijado en -103 que ya era mejor que el de las dos temporadas anteriores: -185 en 2020-21 e incluso -219 en 2021-22. Pues bien, la Roma acaba de aprobar los resultados financieros trimestrales, cerrados el 31 de marzo, destacando un crecimiento del 17% (respecto a marzo de 2023) en los ingresos generales del club. Crecimiento ligado a los ingresos generados por el nuevo patrocinador principal (Riyadh Season), anunciado en octubre, por un total de 25 millones en dos temporadas.
Pero la taquilla también incidió en la mejora de las cuentas, con la Roma alcanzando 57 entradas agotadas consecutivas, celebrando el hito de 1.701.392 aficionados presentes en el Olímpico durante la temporada, con un porcentaje de llenado del estadio del 99%. Finalmente, el comercio minorista también tuvo un buen desempeño, con mayores resultados de ventas para las tiendas físicas y el comercio electrónico. Todo esto determina otro efecto. Y, es decir, la palabra adiós (o casi) a las plusvalías que hay que conseguir a toda costa antes del 30 de junio.