La Roma levantó un muro entorno al talento crecido en casa Edoardo Bove, según informa La Gazzetta dello Sport. El centrocampista nacido en 2002 es una de las joyas con que Mourinho a contando en las primeras salidas de verano, y en su última salida ante Sevilla mostró su cálida. El presidente rossoblù, Enrico Preziosi, lo habría incluido con gusto en el trato que llevo a Shomurodov aa Roma, pero no hubo apertura del club Giallorossi, que no quiere perderlo, a lo sumo dejarlo ir cedido buscando que juegue.
En la última temporada Bove fue protagonista con la camiseta del conjunto Primavera, además de debutar en la Serie A con Fonseca en mayo, en el partido ante el Crotone. Triestina fue la primera llamada a la puerta del conjunto Giallorossi, pero Mourinho se mantuvo firme, al menos hasta completar la plantilla. En las próximas horas sonará sin parar el teléfono del centrocampista ofensivo, que llegó a Roma en 2012 tras realizar una prueba ante los directivos del la Roma, entre los que estuvo, Bruno Conti quien dio su visto bueno.