Tenía que ser su año, el año de su confirmación. Para Ünder, sin embargo, es probable que la actual se convierta en la temporada de la despedida, según escribe el periodista Stefano Carina en II Messaggero. La competencia de n los extremos es cada vez más dura y la impresión, neta de un par de notas altas (goles contra Génova y Lecce), de que la relación con Fonseca no es la mejor. El riesgo de que la aventura en la Roma haya llegado a su fin es alto. También porque en Trigoria continuarán con la política de ganancias de capital de todos modos. Y la venta del turco podría dar oxígeno a los números.
Con Ünder en la “puerta de salida”, Perotti que podría seguirlo y Mkhitaryan que presumiblemente volverá al Arsenal, la Roma pronto podría verse obligada a «compensar» sus extremos. También porque, ya sea que en el futuro se defienda con línea de cuatro o tres, la creencia ofensiva de Fonseca no cambiará: jugar y encontrar espacios en las bandas.
Se buscarán jugadores jóvenes. En las últimas semanas, el técnico ha podido ver las mejoras de Tete, un brasileño del Shakhtar. Desde Argentina, el externo de Banfield, Urzi, mencionó ayer a la Roma entre los clubes que lo contactaron recientemente. Y entre los perfiles que Petrachi está viendo en las últimas semanas también está el de Chakvetadze, jugador que enfrento a la Roma en la última ronda de la Europa League con Gent.
Talento georgiano que en 4-2-3-1 puede jugar en los tres roles del tridente (con preferencia a la izquierda) mientras está en un ataque de tres vías (3-4-3 o 4-3-3), se posiciona principalmente como delantero externo zurdo.
Todo lo antes dicho está sujeto a cambios pero dice un viejo refrán que: “Cuando el río suena, piedras trae consigo”. Lo cierto es que con los números en rojo y la emergencia por el coronavirus muchas cosas pueden cambiar.
