Con el equipo en el tercer lugar de la tabla de la Serie A, la familia Friedkin está preparada para afrontar los retos venideros, intentando evaluar las oportunidades que traerá el calciomercato sin perder de vista que hay que mejorar el presupuesto y el balance de la cuentas, ante los 204 millones de pérdidas y 394 millones de deudas, escribe Massimo Cecchini en La Gazzetta dello Sport. En cualquier caso, esperarán la llegada del nuevo gerente general, Tiago Pinto, para moverse. Será él quien busque y se ocupe de los jugadores, aunque Dan (y quizás sobre todo) Ryan Friedkin tendrá naturalmente la última palabra.
En ataque Fonseca quisiera tener un delantero más y el club está dispuesto a complacerlo, siempre que manden cedido a Carles Pérez. Entonces hay al menos tres soluciones: el regreso de El Shaarawy, 28, de Shanghay Shenua, el bombardeo Roman Yaremchuk, 25, ex Dynamo Kiev (y por lo tanto muy conocido por Fonseca) y ahora en el Gent, con un contrato que expira en 2023, y finalmente la posibilidad de traer al brasileño Bernard, de 28 años, del Everton a Trigoria, con vencimiento de contrato fijado para el 2022, y que ya ha estado a las órdenes del técnico portugués en el Shakhtar Donetsk. Las negociaciones son todas diferentes.
Es obvio que a la Roma le gustaría adelgazar la plantilla. Uno de los candidatos para salir es Diawara, que tiene mercado en la Premier League, mientras que las ventas de Santon y una entre Fazio y Juan Jesús parecen más complicadas. Si sale un defensa, las posibilidades de dar la bienvenida a Reynolds (Dallas) -también en la mira de Juve y Brujas-, Frimpong (Celtic), Soppy (Rennes) y Omeragic (Zúrich) aumentarán antes del verano. El frente de porteros también permanecería abierto, en caso de que llegara una oferta por Pau López. Difícil de que suceda, pero si se materializa, la hipótesis de Sirigu permanece en pie para el mes de enero. Para el verano, entonces, desde Trigoria los ojos están en Gollini, Silvestri y Cragno. A menos que Tiago Pinto y su archivo ya estén preparando sorpresas. Quizás para una Roma que ya está de vuelta en la Champions.
