Teniendo en cuenta la extraordinaria temporada que está viviendo Lukaku, es difícil sorprenderse de que el interés en torno al goleador esté volviendo a aumentar cuenta este domingo La Gazzetta dello Sport. La Roma de los Friedkin que -entre sueldo, comisiones y préstamo- se gastó alrededor de veinte millones para contar con él sólo una temporada. El motivo es claro: ir a la Champions.
Y si sucede, será gracias, en gran medida, a Big Rom, cuyos números hablan por si solos, sin olvidar los goles marcados con su selección en esta parte de la temporada: tres en tres partidos. Por eso sus agentes ya se frotan las manos, dado que en verano, cuando expire el préstamo, se reabrirán para él tanto el rico mercado de la Premier League como el aún más rico mercado de Arabia Saudita. Una opción que, una vez cumpla 31 años, también podría aceptar.
Sin embargo, una cosa es segura: le está yendo muy bien en Roma, aunque sabe que la cláusula de compra de unos 40 millones que se ha fijado el Chelsea (propietario de su contrato) es exigente. Sobre todo si no llega la clasificación para la Champions. Por otro lado, el mismo director general romanista Pinto dijo: «¿Cómo convencería a jugadores como Lukaku para que vinieran si no tuviéramos ese objetivo?«. Es cierto, y precisamente por eso puede haber muchas variables, en primer lugar la posible salida de Mourinho a final de temporada.
¿Cómo puede sorprenderle que los árabes estén dispuestos a hacer locuras por él? La respuesta, por ahora, es una puerta entreabierta: «Me siento honrado por el interés de Al Hilal, pero no estaba del todo convencido. Es el club más grande de Oriente Medio y la liga saudí se convertirá en una de las más grandes del mundo, pero yo no quería dejar Europa todavía«. Prestemos atención a la palabra «todavía». Pronto podría marcar toda la diferencia del mundo.